Debido a la crisis sanitaria que estamos viviendo actualmente, la situación de nuestro país es muy preocupante, además de los problemas personales de salud, también se ha visto afectada la economía a nivel mundial, por lo que todos los españoles lo podemos notar en nuestros bolsillos.
Muchas familias se han quedado sin trabajo, y sin dinero para pagar sus hogares y los bienes básicos para sobrevivir. Algunos de estos casos se deben a las injusticias cometidas por las empresas y los empresarios, lo que ha llevado a un aumento en la contratación de despachos de abogados.
Solo aquellos abogados que son conscientes de las nuevas necesidades y limitaciones de sus clientes han conseguido aumentar su cartera y sus ingresos durante los meses de cuarentena y crisis del Covid-19.
Los abogados deben cumplir con una serie de requisitos básicos para alcanzar el éxito en cada caso, y para fidelizar a sus clientes. Estos aspectos son los siguientes:
- La relación calidad-precio. Cuando está en juego una cuestión jurídica, todo el mundo quiere que esta sea resuelta de la mejor manera posible y por los mejores profesionales en la materia. Sin embargo, no todo el mundo se lo puede permitir. Así, los clientes valorarán los servicios ofertados y el precio de cada uno para empezar su selección de despachos.
- La excelencia del servicio. El cliente va a valorar la flexibilidad en los horarios, en la comunicación, en el trato, etc. Por ejemplo, si el despacho tiene un horario y el cliente tiene una urgencia fuera de este, querrá que se le resuelva el problema.
- Cuidar al cliente. Tener en cuenta sus costumbres, su lugar de procedencia, sus horarios, estar atentos a su forma de ser en los sucesivos encuentros permitirá crear un contexto más acorde a lo que el cliente esté acostumbrado.
- Personalización del trato. Cada cliente es diferente, por lo que tenemos que adaptarnos a cada uno de los clientes. Para ello es importante el conocimiento directo y la cercanía. También es útil para nosotros mismos como abogados ya que podemos captar si el cliente está o no satisfecho.
- Comunicación sencilla, clara. El cliente busca una solución, una explicación simplificada. Somos nosotros quienes tenemos que filtrar y analizar el caso: repasar la ley, extraer posibles soluciones y planteárselas al cliente.
- Tener siempre en cuenta sus opiniones.
- El precio. Los clientes quieren tener claro el precio desde el principio. Muchas veces no se va a poder determinar con exactitud, pero se deben dar todas las garantías y medios para que este se determine. También es conveniente señalar los imprevistos que pudieran surgir.
- Hacer un seguimiento y estar pendiente del cliente.
- Cumplir con lo pactado, en la medida de lo posible. No asegurar ni prometer cosas que no podemos cumplir. Por lo tanto, tener en cuenta qué decimos al cliente.
Siguiendo estas pautas básicas, el éxito del despacho de abogados está asegurado. Por ello, nosotros recomendamos visitar el siguiente enlace donde encontrarán a los mejores abogados de todas las especialidades que cumplirán estrictamente todos estos aspectos.