En los próximos meses, la subida de la inflación y del euríbor podría provocar un aumento en las ejecuciones hipotecarias. Para muchos hipotecados, renegociar las condiciones o acordar un período de carencia será crucial. Sin embargo, existe una opción menos conocida pero poderosa: la cláusula REDAL.
¿Qué es la Cláusula REDAL?
La cláusula REDAL no es una disposición hipotecaria en sí misma, sino una construcción doctrinal. Su nombre proviene del latín “Redito Ad Libitum”, que significa “devolución a voluntad”. En esencia, esta cláusula permite al hipotecado enfrentar dificultades económicas de manera más flexible.
Cuando un contrato hipotecario no especifica exactamente cómo se debe devolver el dinero, el deudor puede acogerse a la cláusula REDAL. Bajo esta disposición, si el hipotecado tiene problemas para cumplir con los pagos, puede devolver el préstamo en cantidades más pequeñas que las originalmente acordadas. Esto es especialmente útil cuando se cuenta con una sentencia favorable.
La Entrevista con Guillem Bou
Recientemente, tuvimos el privilegio de entrevistar a Guillem Bou, un experto matemático que emitió un informe para el gobierno Balear sobre las hipotecas que no contienen la fórmula de cálculo de la cuota mensual. En esta entrevista, Bou profundiza en todo lo relacionado con las hipotecas REDAL y cómo pueden afectar a cualquier consumidor que tenga una hipoteca de este tipo. También se comenta cómo se está tratando la cuestión por parte de los juzgados y de qué forma pueden actuar las personas afectadas.
Protege tu Vivienda
Si tienes una hipoteca REDAL, asegúrate de conocer tus derechos y opciones. Esta cláusula puede ser tu salvavidas ante dificultades económicas. No dudes en buscar asesoramiento legal para entender cómo aplicarla correctamente.
Recuerda: REDAL no solo es una palabra clave, sino también una herramienta poderosa para evitar el embargo de tu vivienda. 🏠🔑
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